Mucha exigencia al hablar de monitores pero es que los diseños esbeltos se han convertido en un elemento más a la hora de valorar. Mientras transcurre el tiempo tenemos dispositivos más finos y quizá las pantallas, junto a los smartphones, son los que más miramos con exigencia para detallar si son realmente delgados.
La gente de Philips quiere hacer del grosor, una de las principales virtudes de su nueva gama de monitores Blade. Con un grosor de 12,9mm y con dos modelos, uno de 23 y otro de 24 pretende ofrecernos una buena calidad de imagen ocupando poco espacio en nuestro escritorio.
La gente de Philips quiere hacer del grosor, una de las principales virtudes de su nueva gama de monitores Blade. Con un grosor de 12,9mm y con dos modelos, uno de 23 y otro de 24 pretende ofrecernos una buena calidad de imagen ocupando poco espacio en nuestro escritorio.
Con respecto a los modelos, el de 24 pulgadas, disponible en color negro utiliza paneles AMVA que hace que los ratios de contraste sean muy elevados con lo cual los colores son más brillantes. El modelo de 23, en color blanco, utiliza IPS con un ángulo de casi 180 grados sin perder calidad desde ninguna posición.
Y para seguir sorprendiéndonos uno de los detalles más resaltantes de estos monitores lo encontramos en su base. En ella tenemos todos los controles táctiles. Las entradas de los diferentes conectores están en la parte trasera de la base por lo que los cables no se verán cuando estén colocados.
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