Un grupo de hackers que se hace
llamar, “GhostShell” filtró datos de 1,6 millones de cuentas correspondientes a
la NASA, FBI, Interpol, el Pentágono, la Reserva Federal, la Agencia Espacial
Europea y muchos otros organismos y empresas, de los cuales los primeros que
nombramos se dan aires de ser de las agencias más seguras del planeta.
Estos ataques sería parte de una
operación llamada #ProjectWhiteFox, que tuvo como objetivo diversidad de
sectores, entre ellos, aeroespaciales, de nanotecnología, banca, leyes,
educación, gobierno y militares. Aparentemente parte de los ataques se
centraron en inyecciones de SQL para obtener acceso a bases de datos de
direcciones IP, registros de ingresos a cuentas, direcciones de correo
electrónico, números telefónicos y otros datos. La información filtrada fue
publicada en sitios como GitHub, Slexy y Private Paste.
GhostShell dejó un mensaje en Pastebin afirmando que los
ataques buscan “promover el hacktivismo a nivel mundial y llamar la atención
sobre la libertad de expresión en la red”. También se hace mención a la
reunión que sostiene la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT), donde
se discutiría un mayor control de parte de la ONU sobre Internet, sugiriendo
que estos ataques son una cierta forma de protesta, aunque las organizaciones
afectadas por el ataque no tienen mucho que ver.
GhostShell ha sido asociado a
Anonymous, y en agosto pasado filtró 1 millón de cuentas de empresas, para
luego en octubre los datos de 120.000 estudiantes universitarios en protesta
por los altos precios de la educación. En noviembre, filtraron 2,5 millones de
registros gubernamentales y empresariales correspondientes a Rusia.