Esta mediana compañía lleva años siendo un exquisito postre para las grandes editoras. Y es que nada más y nada menos, es un estudio innovador, independiente, con una plataforma digital líder, con las ideas muy claras y que cuenta con una gran cantidad de beneficios y de fans.
El cóctel perfecto para ser adquirida por un gigante al estilo Electronic Arts. Pero contamos con un pequeño detalle, los de Valve venderán cara su piel o en su defecto, no la venderán. Valve no está a la venta ni lo estará mientras el señor Newell siga al mando.
Por los momentos no hay nada claro, el periódico norteamericano The New York Times afirmo en una de sus fuentes que existieron negociaciones al respecto entre las dos compañías. Aunque las cifras exactas que se movieron y los motivos de la rotura de negociaciones no se han sabido con exactitud pero apuntan a que, en su momento, los de Seattle estuvieron tasados en $1.000 millones de dólares.
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