Con
todo lo que ha venido pasando con respecto al caso de la línea pérdida en la
barra indicadora de la carga de las baterías del auto eléctrico Nissan Leaf muy
reciente, la noticia de que Ford, GE y la Universidad de
Michigan se pondrán a trabajar muy de cerca con los problemas
de las baterías eléctricas, es más que bienvenida.
El objetivo de esta colaboración es desarrollar un completo sistema de sensores que sean capaces de recopilar información sobre el funcionamiento y estado de las baterías de los coches eléctricos y poder ofrecer un mantenimiento activo que evite problemas de descargas rápidas y no se convierta en un inconveniente para quienes ven con buenos ojos el futuro en estos autos.
El objetivo de esta colaboración es desarrollar un completo sistema de sensores que sean capaces de recopilar información sobre el funcionamiento y estado de las baterías de los coches eléctricos y poder ofrecer un mantenimiento activo que evite problemas de descargas rápidas y no se convierta en un inconveniente para quienes ven con buenos ojos el futuro en estos autos.
Por
consiguiente, el proyecto ARPA-E quiere conseguir reducir el
tamaño de los sensores que hasta ahora se usan para controlar
parámetros básicos como temperatura o voltaje de las baterías actuales de
manera que puedan ser ubicados en zonas del interior de las baterías donde
hasta ahora no hay elementos de control.
De
esta manera, conociendo más el funcionamiento en cada momento de las baterías
de los coches eléctricos, se podrá avanzar en la autonomía y vida útil de las
mismas, aspecto que junto con el precio, conforman la barrera de entrada más
importante para el consumidor moderno. Esperemos que todo este asunto se
resuelva de la mejor manera y no sigamos dependiendo tanto del petróleo y sus
derivados.

No hay comentarios:
Publicar un comentario